lunes, 28 de diciembre de 2015

Reseña de Harry Potter y la piedra filosofal de J.K. Rowling.


Título: Harry Potter y la piedra filosofal (Harry Potter, #1).
Autor: J.K. Rowling.
Precio: 230 pesos mexicanos.
Fecha de salida al público: 1995.
Páginas: 254.
Editorial: Salamandra (distribuida por Océano).
Formato: Pasta dura sin solapas.


Le doy las gracias a editorial Océano por haberme dado un ejemplar de esta obra para poder compartirla y reseñarla para ustedes.


Creo que por primera vez en este Blog, si es que ya lo notaron, no pondré la sección de la Sinopsis pues siendo muy sinceros, dudo mucho que la necesiten.

Ya lo he dicho en Goodreads y lo repito aquí, ¿qué se puede decir de Harry Potter que no se haya dicho ya?, es la saga literaria más famosa de todos los tiempos, es el libro más vendido de la historia aún hoy en día, y es la saga cinematográfica más grande y taquillera jamás hecha, sin duda, cosa que tenga que ver con Harry Potter, cosa que se convierte en oro, es una piedra filosofal literaria, pero para un simple muggle como yo ha significado algo distinto.

Verán, yo nunca fui muy aficionado a leer siendo muy niño, de hecho mi amor por la literatura empezó a mis 16-17 años, por lo que para ese entonces la saga de Harry Potter ya tenía un par de años que había sido terminada, pero sucedió algo curioso. Yo crecí con las películas, recuerdo haber ido al cine a ver cada una de las 8 películas e incluso haber ido a la premier de las últimas 4, recuerdo a la gente vestida con sus bufandas y capas de Hogwarts, recuerdo verlos con una cicatriz en forma de rayo cruzandoles la frente a muchos o incluso otros con sus varitas esperando poder vivir la magia de todo aquello que los emocionó en los libros llevado a la pantalla grande. 

Recuerdo haber ido al menos unas 5 veces al cine a ver Harry Potter y las reliquias de la muerte parte 2 y llorar cada una de las 5 veces porque de alguna manera estaba cerrando un ciclo, mi infancia veía como se cerraban las enormes puertas del castillo de Hogwarts y yo sabía en el fondo que jamás me volverían a dejar entrar y aunque pudiese ver las películas una y otra vez no sería lo mismo.

Pero en mi mente parecía que algo sucedía, de alguna manera mi cerebro bloqueaba la existencia de los libros y no fue sino hasta hace un par de días que recibí el primer libro que descubrí la razón por la que no los había leído...

Miedo.

Miedo a cerrar por completo la serie, miedo a darme cuenta que tan lejos están las películas con las cuales crecí de los libros, miedo a que una vez que lea los 7 libros ya no habrá más, miedo a saber que nunca recibiré mi carta traída por una lechuza que diga que he sido aceptado en el colegio Hogwarts para jóvenes magos.

Estuve muy renuente a leerlo, no podría creer que fuese tan pequeño, apenas 250 páginas, con tan solo 250 páginas J.K. Rowling creó algo mágico y sin igual.

Antes de leerlo volví a ver la película, tenía fácilmente unos 5 años que no veía la primer película de Harry Potter otra vez y al terminarla se me escapo una lagrima de los ojos, era mi infancia, fue entonces cuando decidí leer el libro y quede absolutamente maravillado y no solo eso, me di cuenta de que las películas están hechas casi exclusivamente para los lectores de los libros pues en ellas si bien es cierto que está la trama principal, todos los detalles que hacen realmente mágico el mundo de Harry Potter se escapan. Tengo una lista de unas 5 hojas que dice, COSAS QUE PASAN EN EL LIBRO QUE NO PASAN EN LA PELÍCULA, empezando con que Hagrid usa una moto que le presta el mismísimo Sirius Black, que Dumbeldore es mil veces más raro en los libros, que los Dursley son mil veces más malditos y despreciables en los libros que en las películas, que Neville Longbottom es mucho más importante de lo que parece, que Hermione es dientona, que Duddley es RUBIO!!!, que Ron es narizon, que Harry conoce a Draco desde su primer ida al callejón Diagon, infinidad de cosas! 

Fue sin duda sorprendente, este libro es algo cálido, si tuviera que describir el libro con una sola palabra sería esa, cálido, es el libro PERFECTO para leer sentado en o acostado en tu sillón con un montón de galletas y leche con chocolate, es el libro perfecto para leerle a tus hijos, es el libro perfecto para muchas cosas.

Cuando llegue al final sentía que algo me iba a pasar, no quería terminar, y al leer las últimas páginas, regresando a la estación King's Cross en el andén 93/4 sentía que mis ojos se empañaban con los recuerdos de todo lo que esa historia ha significado para mí.

No digo que sea un Potter Head de corazón ya, tampoco que me sienta parte de algo en especial o de algún club de fans, tan simple y sencillamente entiendo que son libros que le hacen bien al alma, que J.K. Rowling nos dio el regalo de la magia condensada en un único mundo, nos dio sueños y esperanzas a todos aquellos que alguna vez vagamos por las sombras y que a nosotros desde niños y a las generaciones futuras nos dio algo en que creer.

Yo tengo 23 años y creo, creo que algún día cuando sea muy grande y haya vivido lo que me resta de mi vida muggle, y esté recostado en mi cama, cerraré los ojos y me encontraré en un mundo mágico donde todo lo que siempre soñé está al alcance de mi varita, y sabré que como lo fui de niño, seré bienvenido una vez más en el colegio Hogwarts de magia y hechicería, pero ahora será por siempre.

Gracias.


Att.

4 comentarios:

  1. Casi me haces llorar. Que bueno que le diste la oportunidad y conociste la calides de los libros ☺��

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  2. Lloro, me paso casi igual, crecí con las películas, nunca fui a una premiere pues mis padres no podían llevarme, pero en cuanto salían a la renta en VHS corría a verlas, estaba muy renuente en leer los libros, pues sentía que ya lo sabia todo y que no me iba a impresionar ni dar algún dato nuevo. Que equivocada estaba! Los amo por completo y aunque a mis 26 años se ve raro, aun espero por carta de Hogwarts...

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